lunes, 10 de diciembre de 2007

Un atardecer en la ría bien merece la pena


Vista del tramo medio de la ría de Cariño y Ortigueira.

Esta tarde, paseo breve por el tramo medio de la ría de Cariño y Ortigueira.

Con la pleamar no esperaba observar una gran variedad de especies, ni siquiera cantidades significativas.
Llegué en cuanto pude, tarde ya –a eso de las 17:00 h.- a O Puntal, en Feás. Lo primero que constato es que las aves siguen haciendo suyas las estacas de los viveros de mariscos, muy aptas éstas para descansar.

Frente a mi 7 zarapitos trinadores dormitan, menos uno que parece más espabilado.



Numenius phaeopus. Invernante regular en bajos números en la ría.

A los Numenius phaeopus les acompañan algunas gaviotas reidoras y unos pocos archibebes claros, siempre vigilantes...


Tringa nebularia.

Un poco más allá una espátula dormita entre las garcetas comunes, de las que cuento 69 aves. Curioso número este… Ni mucho menos el total.

En otras estacas cuento 67 archibebes comunes.

Buceando, el negrón especulado que lleva días por la zona y, nadando, un zampullín cuellinegro. Ni rastro de las tres barnaclas carinegras, lo cual no significa que se hayan ido ¿o sí?.

La luz cae con rapidez, dejando bellas estampas.



Atardecer en la ría, con las luces de Sismundi al fondo.

Y casi a oscuras, recojo el chiringuito. Todavía tengo tiempo de obtener alguna imagen idílica en ese momento en el que el olor a ría y el sonido de la tranquilidad puede palparse…



Pocos sitios transmiten tanta paz como la ría.

1 comentario:

juan cabeza dijo...

Si te digo que tu blog me gusta ,no miento. si te digo que no entiendo porque ese número te parece curios, si